Consumo excesivo de alcohol en adolescencia aumenta riesgo de adicciones en adultos

Efectos del consumo de alcohol en la adolescencia: ¿una puerta abierta a la adicción en la edad adulta?

Investigadores de la Universidad de Granada han descubierto en un estudio preclínico los efectos duraderos que tiene el consumo de alcohol en modo atracón durante la adolescencia en la función cerebral de los individuos, derivando en una mayor sensibilidad al mismo en la edad adulta. Este hallazgo plantea la posibilidad de que el consumo temprano y compulsivo de alcohol pueda ser un factor de riesgo para el desarrollo de adicciones en la vida adulta.

Los resultados de la investigación realizada por el Instituto de Neurociencias Federico Olóriz y el grupo científico de Neuroplasticidad y Aprendizaje de la UGR han revelado que los adolescentes que consumen alcohol en atracón tienen una mayor sensibilidad a esta sustancia en la etapa adulta. En concreto, se ha observado una "hiperreactividad" en la amígdala, área cerebral relacionada con las emociones y la búsqueda de recompensas, en respuesta al alcohol incluso después de un periodo sin consumir.

Este hallazgo plantea la posibilidad de que el consumo temprano y compulsivo de alcohol pueda ser un factor de riesgo para el desarrollo de adicciones en la vida adulta. Los cambios plásticos permanentes inducidos en la amígdala por el consumo de alcohol durante la adolescencia podrían influir en la sensibilidad y el efecto reforzante del alcohol en la edad adulta, lo que podría impulsar un consumo más elevado y problemático en el futuro.

Además, se ha observado un aumento de la actividad neural y un incremento en la expresión de un microARN regulador de genes relacionados con el desarrollo del sistema nervioso, el cual ha sido asociado con el estrés y la depresión en seres humanos. Asimismo, las pruebas comportamentales han confirmado una "ansiedad potenciada" en los adultos expuestos al alcohol durante la adolescencia, lo que sugiere que este tipo de consumo puede tener repercusiones a nivel emocional y conductual a largo plazo.

Estos hallazgos son especialmente relevantes en un contexto en el que el consumo de alcohol es la droga más consumida en el mundo y en el que, en España, se comienza a consumir a una edad temprana, con un patrón de consumo de riesgo en atracón entre los jóvenes. La adolescencia es un periodo crítico en el desarrollo del cerebro, y la exposición al alcohol en esta etapa puede tener consecuencias duraderas en la función cerebral y en el comportamiento de los individuos.

El estudio, parte de la tesis doctoral de Ana Vázquez de Agredos y dirigido por Milagros Gallo y Cruz Miguel Cendán, ha sido financiado por un proyecto de investigación liderado por Fernando Gámiz. Estos resultados ponen de manifiesto la importancia de prevenir y abordar el consumo de alcohol en la adolescencia, no solo por los riesgos inmediatos para la salud, sino también por las posibles implicaciones a largo plazo en el desarrollo cerebral y el riesgo de adicciones en la vida adulta.