Santa Ana debuta en BME Growth con proyectos sostenibles

Santa Ana se prepara para su debut en el BME Growth: un paso hacia el crecimiento en Latinoamérica

La promotora Santa Ana está lista para dar un importante paso en su trayectoria empresarial al debutar en el BME Growth el próximo 10 de diciembre. Este acontecimiento marca un hito significativo para la compañía, que ha sido valorada en aproximadamente 88,03 millones de euros. Con este movimiento, Santa Ana se convierte en la quinta empresa en entrar a este mercado en lo que va de año, según lo informado por el segmento bursátil de las pequeñas y medianas empresas de la Bolsa española.

La salida a Bolsa de Santa Ana representa una oportunidad única para captar el interés de nuevos inversores y diversificar su base accionarial.

Detalles de la cotización y valoración de la compañía

Las acciones de Santa Ana comenzarán a cotizar bajo el ticker 'SNTA', tras la aprobación del folleto de salida a Bolsa por parte de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La valoración de la compañía se ha realizado a través de una evaluación independiente, que ha fijado un precio de 13,5 euros por acción. Este precio no solo establece la base para el inicio de la contratación de las acciones, sino que también refleja la confianza del consejo de administración en el potencial de la empresa.

El asesor registrado de Santa Ana es Orbyn Capital Markets, mientras que Singular Bank actuará como proveedor de liquidez. Estos socios estratégicos jugarán un papel crucial en el éxito de la cotización de la empresa en el BME Growth.

Enfoque en el desarrollo de proyectos urbanísticos sostenibles

Santa Ana se especializa en la planificación, gestión y desarrollo de proyectos urbanísticos e inmobiliarios integrales en Latinoamérica, centrándose en el concepto de 'microciudades' sostenibles. Este enfoque innovador no solo busca el desarrollo económico, sino también la creación de entornos habitables y sostenibles que beneficien a las comunidades locales.

La compañía ha demostrado un compromiso firme con la sostenibilidad y el desarrollo responsable, lo que la posiciona como un actor relevante en un mercado en crecimiento. La obtención de un compromiso de capital de hasta 20 millones de euros por parte de LDA Capital a mediados de septiembre, refuerza su posición financiera y le permitirá llevar a cabo sus planes de crecimiento.

Objetivos de la salida a Bolsa

Con la salida a Bolsa, Santa Ana tiene como objetivo captar el interés de nuevos inversores, lo que le permitirá diversificar su base accionarial. Este movimiento estratégico también busca mejorar el acceso a los mercados públicos de capitales, lo que es crucial para el crecimiento futuro de la empresa.

Además, la cotización en un mercado regulado y auditado fortalecerá la gobernanza corporativa de Santa Ana, lo que a su vez incrementará la confianza de los inversores. La compañía espera que esta mayor transparencia y profesionalización se traduzca en un aumento de su credibilidad ante inversores, clientes y socios estratégicos.

La salida a Bolsa permitirá a Santa Ana escalar sus operaciones y consolidarse como un actor clave en el mercado latinoamericano.

Declaraciones del presidente de Santa Ana

José Antonio Fernández Gallar, presidente de Santa Ana, ha declarado que la aprobación del folleto de salida a Bolsa representa un "nuevo gran hito" para la compañía. Este acontecimiento se produce tan solo seis meses después de anunciar su intención de entrar en el mercado, lo que demuestra el compromiso de Santa Ana con su crecimiento y la creación de valor para sus accionistas.

Fernández Gallar ha subrayado que este paso es una muestra de confianza en el proyecto de la empresa. "La salida a Bolsa nos permitirá escalar nuestras operaciones, atraer nuevas inversiones y consolidarnos como actores clave en un mercado que presenta oportunidades extraordinarias como es Latinoamérica", ha añadido.

Composición del consejo de administración

El consejo de administración de Santa Ana está compuesto por un equipo de profesionales con una amplia experiencia en el sector inmobiliario. El consejero delegado, Jaime Garbisu Miñón, lidera un equipo que incluye al presidente, José Antonio Fernández Gallar, y al vicepresidente, Gregorio Esteban Martínez. Además, el consejo cuenta con cuatro consejeros, de los cuales dos son independientes: Rafael Guardans Cambó y Emilio de la Guardia Gascuñana. Los otros dos son dominicales: David José Devesa Rodríguez y Guillermo García Ruiz.

La experiencia y trayectoria de estos miembros del consejo son fundamentales para asegurar la viabilidad del proyecto y el cumplimiento de los requerimientos establecidos para los gobiernos corporativos. Este sólido equipo directivo es un indicador de la seriedad y el compromiso de Santa Ana con su misión.

Impulso a la marca y a la estrategia de crecimiento

La salida a Bolsa no solo tiene implicaciones financieras, sino que también es una oportunidad para potenciar el reconocimiento de la marca Santa Ana. Al formar parte de un mercado regulado, la empresa espera mejorar su visibilidad y credibilidad en el sector inmobiliario. Este reconocimiento es vital para atraer a nuevos inversores y socios estratégicos, lo que a su vez puede facilitar el desarrollo de futuros proyectos.

La estrategia de crecimiento de Santa Ana se centra en la creación de microciudades que integren sostenibilidad y urbanismo, lo que la diferencia de otros competidores en el mercado. Este enfoque innovador no solo busca beneficios económicos, sino también un impacto positivo en las comunidades donde se desarrollan los proyectos.

Perspectivas de futuro para Santa Ana

La entrada de Santa Ana en el BME Growth es solo el comienzo de un ambicioso plan de expansión en Latinoamérica. La compañía está posicionada para aprovechar las oportunidades que surgen en esta región, donde la demanda de desarrollos sostenibles y urbanísticos está en aumento. Con el respaldo de inversores y un consejo de administración sólido, Santa Ana tiene el potencial de convertirse en un líder en el sector inmobiliario de la región.

La empresa está comprometida con la innovación y la sostenibilidad, lo que le permitirá adaptarse a las cambiantes condiciones del mercado y a las necesidades de las comunidades locales. A medida que se desarrolla su cartera de proyectos, Santa Ana espera no solo generar beneficios económicos, sino también contribuir al bienestar social y ambiental de las áreas en las que opera.

En resumen, la salida a Bolsa de Santa Ana representa una oportunidad emocionante para la empresa y sus inversores. Con un enfoque claro en el crecimiento sostenible y un equipo directivo experimentado, la compañía está bien posicionada para enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades que ofrece el mercado latinoamericano.