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CEOE se opone a jornada laboral de 37,5 horas semanales

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CEOE rechaza la propuesta del Ministerio de Trabajo sobre la reducción de jornada laboral

El Comité Ejecutivo extraordinario de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) ha tomado una decisión categórica en relación con la reciente propuesta del Ministerio de Trabajo sobre la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales a partir de 2025. Esta decisión fue adoptada por unanimidad, reflejando la postura firme de las organizaciones empresariales frente a una medida que consideran una intromisión en la autonomía de la negociación colectiva.

La CEOE y Cepyme han manifestado que no pueden apoyar una propuesta que modifica por ley aspectos que deberían ser acordados en los convenios colectivos.

La autonomía de la negociación colectiva en el centro del debate

Las organizaciones empresariales, en un comunicado conjunto, argumentan que la reducción de jornada es un tema que debe ser tratado a través de la negociación colectiva, tal y como establece el artículo 37.1 de la Constitución Española. Este artículo garantiza el derecho a la negociación entre los representantes de los trabajadores y los empresarios, así como la fuerza vinculante de los convenios alcanzados.

Desde la perspectiva de CEOE y Cepyme, la propuesta del Ministerio de Trabajo no solo debilita el marco de negociación colectiva que ha sido fundamental para mantener la paz social en el país durante las últimas cuatro décadas, sino que también podría tener consecuencias negativas para muchas empresas, especialmente las pequeñas y medianas (pymes) y los autónomos. Estas organizaciones advierten que la imposición de una reducción de jornada por ley podría llevar a una reorganización forzada que comprometería la capacidad de estas empresas para funcionar de manera eficiente y, en última instancia, su viabilidad.

Impacto en la productividad y en el tejido empresarial

Contrario a lo que sostiene el Ministerio de Trabajo, las patronales han expresado su preocupación por la posibilidad de que la reducción de la jornada laboral no se traduzca en un incremento de la productividad. En un tejido productivo donde aproximadamente el 98% de las empresas son pymes y autónomos, y donde sectores clave como los servicios y el turismo son predominantes, la medida podría resultar contraproducente.

Las organizaciones empresariales subrayan que la adopción de una medida de este tipo, de carácter general, carece de sentido si se considera la diversidad existente entre los distintos sectores económicos y las variaciones que se presentan entre las comunidades autónomas. La heterogeneidad del mercado laboral en España plantea serios interrogantes sobre la eficacia de una reducción de jornada uniforme.

La propuesta del Ministerio de Trabajo y sus implicaciones

En la última reunión de la mesa de diálogo social sobre la reducción de jornada, el Ministerio de Trabajo estableció un plazo hasta el 11 de noviembre para que tanto sindicatos como empresarios se pronunciaran sobre su propuesta. Esta propuesta incluye nuevas medidas destinadas a atraer a CEOE y Cepyme hacia un acuerdo que, hasta el momento, parece difícil de alcanzar.

Una de las medidas más destacadas de la propuesta del Gobierno es la concesión de ayudas directas por un importe total de hasta 375 millones de euros, dirigidas a las pymes con menos de cinco trabajadores en sectores como la hostelería, el comercio, la agricultura, la limpieza y las peluquerías. Este enfoque busca mitigar el impacto que la reducción de jornada podría tener en estas pequeñas empresas.

Las ayudas directas propuestas, de hasta 6.000 euros por microempresa, se suman a otras iniciativas planteadas por el Ministerio para atraer a las organizaciones empresariales al acuerdo.

Nuevos programas de ayudas para las microempresas

El Ministerio de Trabajo ha planteado la introducción de dos nuevos programas de ayudas, que se sumarían a los existentes dentro del 'Programa Acelera Pyme'. Estas ayudas están condicionadas a que las microempresas mantengan el nivel y la calidad del empleo durante un periodo de tres años. Este enfoque tiene como objetivo asegurar que la reducción de jornada no afecte negativamente a la estabilidad laboral de los trabajadores.

Además, el Gobierno ha propuesto el denominado 'Plan Pyme 375', que está orientado a empresas de menos de diez trabajadores. Este plan incluye medidas de asesoramiento y bonificaciones para fomentar la creación de empleo fijo y la conversión de contratos a tiempo parcial en contratos a tiempo completo, como consecuencia de la reducción de la jornada laboral.

Las bonificaciones que se contemplan en este plan, cuyo diseño aún está en desarrollo, podrían variar entre el 20% y el 100% de las cotizaciones empresariales, siendo mayores para la contratación de jóvenes y mujeres. Esta estrategia busca incentivar a las empresas a adaptarse a la nueva normativa, aunque las organizaciones empresariales siguen mostrando reticencias.

La postura de las organizaciones empresariales ante el diálogo social

Las patronales han dejado claro que, a pesar de las propuestas del Ministerio de Trabajo, no pueden comprometer su postura en defensa de la autonomía de la negociación colectiva. La CEOE y Cepyme han enfatizado que cualquier modificación de la jornada laboral debe ser el resultado de un acuerdo entre las partes implicadas, y no una imposición legal que podría tener efectos adversos sobre el tejido empresarial.

El secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, ha advertido que si CEOE no se suma al acuerdo, algunas de las propuestas podrían quedar fuera de la mesa de negociación. Esta declaración ha generado un clima de incertidumbre en el que las organizaciones empresariales se sienten presionadas para aceptar condiciones que consideran inadecuadas.

La necesidad de un enfoque equilibrado

Las organizaciones empresariales han hecho hincapié en la importancia de abordar la reducción de jornada desde una perspectiva equilibrada, que tenga en cuenta las particularidades de cada sector y la diversidad del mercado laboral español. La CEOE y Cepyme abogan por un diálogo constructivo que permita encontrar soluciones que beneficien tanto a los trabajadores como a las empresas.

La propuesta de reducción de jornada ha suscitado un intenso debate en el ámbito laboral, y las organizaciones empresariales continúan defendiendo su postura en favor de la negociación colectiva. La CEOE y Cepyme han reiterado que cualquier cambio en la legislación laboral debe ser fruto de un consenso entre las partes, respetando la autonomía y la capacidad de negociación de los convenios colectivos.

Perspectivas futuras en el diálogo social

A medida que se acerca la fecha límite establecida por el Ministerio de Trabajo, la presión aumenta sobre las organizaciones empresariales para que se posicionen respecto a la propuesta de reducción de jornada. La CEOE y Cepyme se encuentran en una encrucijada, donde deben equilibrar sus intereses con las demandas del Gobierno y las expectativas de los trabajadores.

El futuro del diálogo social en España dependerá en gran medida de la capacidad de las partes para llegar a un acuerdo que respete la autonomía de la negociación colectiva y que, al mismo tiempo, garantice la viabilidad de las empresas en un contexto económico en constante cambio. Las decisiones que se tomen en las próximas semanas tendrán un impacto significativo en el mercado laboral y en la relación entre empresarios y trabajadores en el país.


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