Rueda critica independentismo y defiende intereses gallegos ante pactos
Alfonso Rueda y su mensaje a Salvador Illa: una visión crítica del independentismo
En un reciente acto celebrado en Ferrol, el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, expresó su deseo de "suerte" al nuevo presidente de Cataluña, Salvador Illa, pero no sin antes hacer una serie de reflexiones sobre el contexto político que rodea a esta nueva etapa en la comunidad catalana. Rueda, que también es líder del Partido Popular de Galicia (PPdeG), mostró su preocupación por lo que considera un independentismo insaciable que, a su juicio, complicará la gestión de Illa.
El desafío del independentismo en Cataluña
Rueda no se anduvo con rodeos al afirmar que el nuevo presidente catalán se encuentra en una situación difícil, especialmente teniendo en cuenta el entorno político actual. Según él, Illa tendrá que lidiar con un independentismo que no se conforma con las cesiones ya realizadas y que, por el contrario, siempre exigirá más. Esta visión crítica del panorama político catalán se ve reforzada por el reciente episodio de la huida del expresidente Carles Puigdemont, que Rueda calificó de "esperpento".
El líder gallego considera que la situación actual es un reflejo de una legislatura que podría estar marcada por el caos y la inestabilidad, y que es un motivo de burla para muchos españoles. En este sentido, Rueda lamentó que los líderes del Gobierno central, como Pedro Sánchez y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, mantengan un perfil bajo en este asunto, lo que a su juicio contribuye a agravar la situación.
Las implicaciones del pacto PSC-ERC
Uno de los puntos más críticos que Rueda abordó en su discurso fue el pacto entre el Partido Socialista de Cataluña (PSC) y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), que ha llevado a la creación de un nuevo marco económico para Cataluña. Este pacto, según Rueda, podría tener repercusiones negativas para Galicia, ya que la comunidad gallega podría dejar de recibir una cantidad significativa de fondos, estimados en 444 millones de euros anuales, si se implementa un concierto económico similar al de Cataluña.
Rueda enfatizó que este tipo de acuerdos no solo perjudican a Galicia, sino que también van en contra del principio de solidaridad que debería prevalecer en un país como España. A su juicio, el hecho de que algunas comunidades se beneficien a expensas de otras es un chantaje que no se puede permitir.
La vigilancia de Galicia ante el nuevo escenario
Ante esta situación, Rueda ha dejado claro que Galicia estará "muy vigilante". Su mensaje es contundente: no se permitirá que los intereses de la comunidad gallega se vean comprometidos por las demandas de otras comunidades que, en su opinión, buscan avanzar a costa de los demás. Rueda ha subrayado la importancia de que se convoquen reuniones como la Conferencia de Presidentes y el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), donde se discuta la nueva financiación autonómica de manera conjunta.
La postura de Rueda es clara: la colaboración entre comunidades autónomas es esencial, pero no debe llevar a que algunas se beneficien de forma desproporcionada. "Es posible progresar conjuntamente", afirmó, "pero cuando unos quieren progresar a costa de otros, los otros nos tendrán enfrente".
El papel del Gobierno central en la crisis catalana
Rueda también se mostró crítico con la actuación del Gobierno central, al que acusó de no tomar una posición firme ante lo que considera un desastre político en Cataluña. La falta de respuesta de Sánchez y Grande-Marlaska en momentos clave ha sido objeto de su descontento. Rueda sugirió que esta inacción podría interpretarse como una connivencia con las acciones del independentismo, lo que genera un clima de impunidad que podría empeorar la situación.
El presidente de la Xunta no escatimó en palabras al señalar que lo que está sucediendo en Cataluña no es solo un problema local, sino que afecta a todo el país. La percepción de que las fuerzas de seguridad del Estado se han convertido en motivo de risa y burla es un tema que ha resonado en la opinión pública y que Rueda considera alarmante.
Una llamada a la unidad y la igualdad
En medio de esta situación tensa, Rueda hizo un llamado a la unidad y a la igualdad entre las comunidades autónomas. "Si somos un país, nos basamos en la solidaridad y la igualdad básica de todos los territorios", afirmó. Su mensaje es que no se puede permitir que se desvíen recursos que corresponden a Galicia para satisfacer las demandas de otras comunidades.
Este enfoque destaca la necesidad de una política de financiación que garantice que todas las comunidades reciban lo que les corresponde, sin que unas se vean favorecidas a expensas de otras. Rueda concluyó su intervención reafirmando su compromiso de defender los derechos de Galicia, dejando claro que no se quedará de brazos cruzados ante cualquier intento de perjudicar a su comunidad.
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