Impugnación

Vox recurre delegación de voto de Puigdemont y Puig en Parlament ante TC

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Vox recurre ante el Constitucional la admisión del voto delegado de Puigdemont y Puig en el Parlament

Vox ha presentado un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional (TC) contra el acuerdo de la Mesa de Edad del Parlament que permitió la delegación del voto de los diputados Carles Puigdemont y Lluís Puig. Juan Garriga, portavoz de Vox en el Parlament, asegura que esta decisión "supone la destrucción absoluta del vínculo entre representantes y representados".

En el recurso presentado por Garriga se argumenta que la delegación del voto a terceros sin una justificación extraordinaria va en contra del derecho consagrado en el artículo 23.1 de la Constitución. El dirigente de Vox pide al Constitucional que ampare sus derechos y declare nulos los acuerdos de la Mesa de Edad del Parlament que permitieron esta situación.

El requisito de presencialidad y la situación personal de Puigdemont y Puig

Garriga recuerda en su recurso que Carles Puigdemont y Lluís Puig tienen órdenes de busca y captura e ingreso en prisión vigentes por la causa del 'procés'. Además, señala que residen voluntariamente en Bélgica para evitar rendir cuentas con la justicia, lo que, a su juicio, les inhabilita para votar delegadamente. El propio reglamento del Parlament establece que las votaciones para la elección de los cargos de la mesa se realizan mediante papeletas que los diputados deben entregar personalmente.

La decisión del Tribunal Constitucional y la comparación con casos anteriores

El TC ya admitió a trámite un recurso del PP en el mismo sentido, aunque rechazó suspender de forma cautelar el voto delegado de Puigdemont y Puig para la elección de los órganos de la Cámara. Garriga destaca que el pasado julio el TC declaró inconstitucional el acuerdo de la Mesa del Parlament de la pasada legislatura que permitió la delegación del voto en un supuesto similar al actual.

En este contexto, Vox continúa su lucha contra lo que considera una vulneración de los derechos fundamentales en el Parlament de Cataluña. La batalla legal está abierta y el Tribunal Constitucional deberá pronunciarse sobre si la admisión del voto delegado de Puigdemont y Puig fue o no conforme a la Constitución y al reglamento parlamentario.


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