Rishi Sunak propone medidas drásticas para abordar crisis de inmigración y vivienda

Planes de Rishi Sunak para restringir la inmigración y reducir impuestos en Reino Unido

El primer ministro británico, Rishi Sunak, ha presentado sus planes para restringir la inmigración y reducir impuestos en Reino Unido de cara a las próximas elecciones del 4 de julio. Estas medidas forman parte del manifiesto conservador presentado en el circuito de Silverstone, donde Sunak ha prometido "menos inmigración, menos impuestos y pensiones protegidas" para seducir al electorado.

En un intento por contrarrestar la ventaja que las encuestas dan al líder laborista Keir Starmer, Sunak ha alertado de que los laboristas cambiarán las reglas para perpetuarse en el poder si ganan las elecciones. El plan conservador incluye reducir los pagos al seguro nacional, ampliar las exigencias para recibir prestaciones y bajar impuestos indirectos, tasas de autónomos y recortar plantilla entre los funcionarios, con un ahorro estimado de 17.200 millones de libras hasta 2030.

Una de las medidas más polémicas del plan de Sunak es la reducción a la mitad del número de llegadas de inmigrantes, así como la posibilidad de obligar a los recién llegados a pagar un recargo sanitario o contratar un seguro privado si su estado de salud supone una carga para el sistema público. Además, se establecerá un "límite legal vinculante" para los visados de trabajo y familiares de quienes posean estos permisos laborales.

En cuanto a la política migratoria, el Gobierno conservador llevará a cabo de manera "implacable" y "continua" la "expulsión permanente" de inmigrantes ilegales a Ruanda todos los meses a partir de julio, con el objetivo de detener la llegada de embarcaciones a través del Canal de la Mancha. Sunak también ha hecho hincapié en la prioridad de la seguridad nacional frente a la jurisdicción de tribunales extranjeros, incluida la Convención Europea para los Derechos Humanos (CEDH).

Además de las medidas migratorias y fiscales, Sunak ha prometido un ambicioso plan para construir 1,6 millones de viviendas en un intento por abordar las dificultades de acceso a la vivienda en el país. Estas propuestas forman parte de la estrategia del Partido Conservador para las elecciones del 4 de julio, donde se enfrentarán a una dura competencia por parte de los laboristas de Keir Starmer.