Milei reduce Estado, despide funcionarios y renuncia a privilegios para equilibrio fiscal

Milei anuncia la reducción del Estado y despidos masivos en Argentina

El presidente de Argentina, Javier Milei, ha confirmado su intención de despedir a otros 50.000 funcionarios públicos con el objetivo de "reducir el Estado a la mitad", tal y como había prometido durante su campaña electoral. En medio de tensiones con el sindicato Asociación Trabajadores del Estado (ATE), Milei ha afirmado que ya se han realizado 25.000 despidos y que se espera llegar a los 75.000 en total.

En el marco del Latam Economic Forum 2024, Milei ha destacado su lema de "afuera" como una forma de llevar adelante su política de reducción del Estado. Según sus declaraciones, esta medida implica la eliminación de ministerios y la optimización de la estructura estatal. Además, ha señalado que su gestión se caracterizará por la austeridad, llegando incluso a renunciar a la paga vitalicia que le correspondería como expresidente.

En un contexto de críticas a la oposición, el mandatario argentino ha denunciado el aumento del salario de los diputados en un 80 por ciento, al mismo tiempo que han aprobado un proyecto económico que considera perjudicial para el país. En este sentido, Milei ha rechazado las jubilaciones de privilegio y ha enfatizado la importancia de trabajar en beneficio de la sociedad para garantizar un futuro laboral estable.

Asimismo, Milei ha expresado su firme postura respecto a las medidas fiscales y ha asegurado que no dudará en vetar cualquier intento de la oposición de desequilibrar las finanzas públicas. Considera que el equilibrio fiscal es fundamental para el desarrollo económico del país y ha destacado la necesidad de realizar ajustes para alcanzar este objetivo.

En un tono contundente, el presidente argentino ha afirmado que la eliminación de las jubilaciones de privilegio es un incentivo para la buena gestión y ha advertido que aquellos que no cumplan con sus responsabilidades se verán en apuros. Con estas medidas, Milei busca sentar las bases para una administración eficiente y transparente, en la que el bienestar de la sociedad esté por encima de los intereses individuales.